Un poco de historia

Ha pasado mucho tiempo desde mi primera moto en 1976, una Bultaco Junior 74 de segunda mano. Aquella moto cuando se estropeaba, tenía que repararla yo mismo y con poco dinero, por lo que no me quedaba más remedio que ir desmontando y aprendiendo.
Los años han pasado y lo que era un entretenimiento fue pasando a un hobby, luego a una colección, y desde el año 2000 comencé a restaurar las motos de mis amigos que poco a poco se transformaron en clientes.
Hoy es mi profesión, con la que disfruto recuperando las más de 200 motos restauradas que he vuelto a poner en su estado original de funcionamiento.
Desde la básica Mobylette a la compleja DKW, he restaurado todo tipo de motos clásicas, nacionales o extranjeras. Y sigo aprendiendo con el día a día.
Mis talleres están en Madrid y en Salamanca, trabajo en ambos lugares y me encargo del traslado desde cualquier lugar.